Ahora que las llamas ya están apagadas en el autódromo de Las Termas habrá que recurrir al pasado. Sí. No hace falta mirarse de reojo con desconfianza ante la afirmación. O pensar que es una locura mirar hacia atrás luego del incendio que devoró toda la zona alta del circuito internacional.
Hay que hacer memoria hasta 2008. Esa enorme estructura pintada de rojo que se construyó para tener boxes a la altura de las exigencias de la Federación Internacional de Automovilismo y de la Federación Internacional de Motociclismo, no existían. Carpas, algunas oficinas móviles y desmontables eran las que se usaban.
Ese pasado irrumpe esperanzador en medio del presente que sí, es triste, desolador y frustrante. No sólo los que tenemos vínculo directo con el asfalto del circuito santiagueño conocemos el trabajo progresivo para llegar a mantenerse desde 2014 en el calendario de MotoGP. Fue artesanal y más toma ese sentido teniendo en cuenta que en pocas horas el trabajo de más de cinco años se quemó con el fuego.
“Fue muy rápido. A las 3 de la mañana seguía el fuego”, recordó Adriano López. En el drugstore “El Lago”, mientras trabajaba, fue testigo del incendio. “Hace seis años que mi hermano tiene este negocio y sentí mucha lástima y pena. Se perdió mucho”, explicó sus sensaciones portando una remera de Valentino Rossi.
Adriano tira el dato. “Ellos trabajan en el autódromo”, apuntó hacia una de las mesas. Sentados, casi desparramados en las sillas y transpirados, están dos hombres. Piden reserva de nombres y uno de ellos sostiene: “es como que mi casa se haya quemado”. Por eso no dudó en subirse a su camioneta para llegar desde la capital santiagueña a la villa turística. Ayudar en lo que se pueda y deba dentro de los protocolos de seguridad era la meta. Así lo hicieron.
“Lo pueden armar”, dijo con seguridad uno de ellos. La certeza que plantea tiene que ver con que, incluso la fecha de MotoGP con posibilidades de hacerse, podría para él concretarse con la estructura ya reconstruida. Aclara que su postura es aventurera teniendo en cuenta que ni pasaron 24 horas del siniestro y que todavía hay sectores que humean. Las tareas de peritajes van despacio, de forma obligatoria. Tampoco es un ingeniero, ni arquitecto, pero al autódromo lo camina todos los días; lo conoce. “Tampoco fue algo intencional, como dicen algunos medios”, aseguró. A sus fundamentos visuales, por haber tenido contacto, con las ruinas les agregó los de vida. “Pensá: con todo lo que pasó, las competencias que no se hicieron y las pérdidas económicas, sería una estupidez”, dijo.
Hasta el momento, no hay ninguna competencia cancelada y desde lo más íntimo del autódromo aseguran que no habrá nada de eso. Mirar al pasado ante la situación, es positivo y recrear la postal de las estructuras desmontables, despejando el sector del amplio playón podrá permitir el mantenimiento del calendario (ver apostillas) 2021 pese al voraz incendio.
Las mejores visuales siempre estuvieron en lo más alto
El autódromo termense fue elogiado por el público por la buena ubicación de las gradas. Pero la zona alta que se incendió, era el sitio ideal. Los amantes de las competencias de velocidad no dudaban en pagar más por estar allí. Además, aire acondicionado, pantallas especiales, solían ser otros beneficios.
Ayudaron espontáneamente
Tanto afuera del autódromo como en el cuartel de bomberos (foto), hubo donaciones. Leche fue lo que mayor alivio generó a los bomberos y al personal de rescate. La ingesta del líquido contrarresta los efectos nocivos al inhalar el humo.
El calendario de competencias
El programa que estaba establecido es el siguiente: 4 de abril, Córdoba Pista; 9 de mayo, Track Day de motos; 11 de julio, Argentino de motos; 5 de septiembre, Track Day de motos; octubre o noviembre, MotoGP. El museo abrirá el martes.
Una torre con ventanas que invitaban a hacer una pausa
En la última torre que llevaba al centro de prensa, unas pequeñas ventanas eran un punto seductor para detenerse y ver el giro preciso de las máquinas. Los estudios de daño que hagan los especialistas determinarán si seguirá o no.